PEMEX, UN NEGRO FUTURO

Octavio Romero  Oropeza, designado como futuro director de Petróleos Mexicanos (PEMEX) por el presidente electo Manuel López Obrador,  se ostenta como ingeniero agrónomo, pero según algunas publicaciones no existe el registro de su título en el Registro Nacional de Profesiones. Como experiencia solo presenta el haber sido oficial mayor en el gobierno del Distrito Federal de López Obrador.

Octavio Romero futuro director de Pemex y
Manuel López Obrador presidente electo

Lo anterior solo muestra la ligereza con que el presidente electo viene haciendo la selección de los funcionarios que ocuparán puestos relevantes en la nueva administración. Si bien, no todos, en este caso en particular llama la atención que, siendo un puesto que requiere de una excelente preparación y una vasta experiencia Octavio Romero carezca de la más mínima en el área de petro-químicos, pero además la preparación académica de que se ostenta no tiene relación alguna con el puesto asignado. Aquí se aprecia que López Obrador, para un puesto que exige la más alta calificación técnica y un amplio bagaje en el ramo, se inclina por elegir a un amigo incondicional sin ninguna de ellas.

Por supuesto que con un salario de 107,999.99 pesos mensuales, 1,295,999.88 pesos anuales, equivalentes a 68,936.16 dólares, ya que ningún funcionario podrá ganar más que el presidente, según lo ha declarado el propio presidente electo,  jamás se podrá contratar a la persona idónea para tan importante puesto.

Para tener una idea cómo las compañías petroleras eligen a sus directores, con que preparación y experiencia cuentan, pero además que salarios perciben, me di a la tarea de investigar un poco quienes son los directores generales de algunas de las empresas más importantes del mundo.

Darren Woods, director ejecutivo y presidente de EXXON MOBIL. Licenciado en ingeniería eléctrica por la Universidad de Texas A & M, con 24 años de experiencia en la propia compañía. Recibió  14,1 millones de dólares en 2017.

Michael K. Wirth, director ejecutivo y presidente de CHEVRON CORPORATION, licenciado por la Universidad de Colorado en ciencias y química, ingresó en la compañía en 1988, 30 años de experiencia. Recibió 11.7 millones de dólares en 2017 y se estima que sus ingresos en 2018 alcanzarán los 15 millones de dólares.

Ben Van Beurden, director ejecutivo de ROYAL  DUTCH SHELL, tiene maestría en ingeniería química por la Universidad Tecnológica de Delft, ingresó a la compañía en 1983, 35 años de experiencia. Sus ingresos en 2017 fueron 8.9 millones de euros.

Elder Saetre, director ejecutivo de STATOIL, la empresa noruega de petróleo que, lo que muchos no saben, es parcialmente privada y cotiza en la bolsa de valores de Nueva York, tiene una Maestría en economía por la Universidad de Norwegian School of Economics, ingresó a la empresa en 1980, 38 años de experiencia. La empresa autorizó a partir del 1 de septiembre de 2017 un salario anual de 8.8 millones de Coronas Noruegas.

Sultán Ahmed Al Jaber, director general y director ejecutivo de ADNOC, compañía nacional de petróleos de Emiratos Árabes Unidos, tiene una Licenciatura en Ingeniería Química por la Universidad del Sur de California, un Doctorado en negocios y economía por la Universidad Coventry del Reino Unido y maestría en negocios y administración por la Universidad Estatal de California. En este caso es ocioso hablar de ingresos.

Según Forbes PEMEX en 2015 ocupaba el puesto número 9 entre las compañías petroleras del mundo con 3.6 millones de barriles. En 2018 bajó su producción a 2.8 millones de barriles.

En el sexenio de Enrique Peña Nieto se promovió una reforma energética que propone entre otras cosas la participación de compañías con capital privado para la exploración y producción de petróleo en aguas profundas con el fin de recuperar la producción. Sin embargo el presidente electo Manuel López Obrador, es muy ambiguo respecto a los contratos ya signados, una vez dijo que se cancelarian, posteriormente corrigió y solo se concretó a decir que se revisarían. En cuanto al futuro prácticamente ha manifestado su negativa al otorgamiento de nuevos contratos. De esta forma no se vislumbra como pueda crecer la producción de PEMEX, más bien se teme que siga cayendo.

En el pasado, PEMEX, debido a la bonanza de los precios del petróleo, el gobierno la consideró como un desfogue para mitigar el desempleo y se sobre contrató personal, llegando a tener en 2013 155 mil trabajadores (Exxon Mobil la sexta compañía petrolera y que tiene subsidiarias en medio mundo tenía en 2009 79 mil trabajadores). Los trabajadores en PEMEX además gozan de prestaciones muy superiores al resto de los trabajadores mexicanos, entre otros beneficios se jubilan a los 55 años o a los 25 años trabajados. Esto ha devenido en que a lo largo de sus 80 años de existencia haya acumulado una carga financiera por pensiones sobre 100 mil jubilados, motivo por el cual el gobierno mexicano tuvo que convertir en deuda pública 1 billón 474 mil 88 millones de pesos. A pesar de de este alivio, la deuda total de PEMEX ascendió al cierre de 2017 a 2 billones 5 mil 800 millones de pesos.

Extracción, producción, operación, refinación, distribución, incursión en el mercado internacional del petróleo, constante fluctuación de precios, manejo de la deuda; todo ello requiere de un verdadero experto, bien preparado con gran experiencia. Todo lo que no tiene el “ingeniero agrónomo” Octavio Romero Oropeza.

Parece que en el futuro el petróleo en México ya no será oro negro, solo quedará en negro futuro. 

Adolfo Camacho Gómez